La oscuridad no existirá jamás en mi entorno.
la Pluma azul, que me guardé, de su visita
sigue en el santuario bendito de sus violetas.
San Miguel, Arcángel, piedras celestes y los inciensos
que a diario perfuman el centro de mi hogar.
No la utilizo, sino para embriagarme
de la tinta con que escribió una "N "
Nelo, espíritu de guerrero araucano,
estremeció mis manos,
para hilvanar en defensa de los míos
las letras en palabras y éstas en versos.
Pluma azul, seguirás en mi ritual de aprendiz
buscando los mensajes que entre líneas,
me señalas, siempre en dirección de la Luz.
Luz de Esperanza,
Luz de Sueños,
Luz de Libertad,
Luz de Pluma azul.